Leyendo:
Legionella: cómo se contagia y qué hacer para prevenirla
Artículo Completo 5 minutos de lectura

Legionella: cómo se contagia y qué hacer para prevenirla

Seis individuos murieron en Tucumán a raíz de una neumonía bilateral vinculada con la bacteria Legionella, además de otras 22 personas que se vieron afectadas. Es por este brote, que las preguntas que surgen son: qué es la Legionella y qué hacer para prevenir el contagio.

LA LEGIONELLA

«Empecemos por el principio, la Legionella es una bacteria que se conoce desde 1977 y que ha ocasionado brotes diversos en todo el mundo, incluso en nuestro país», precisó Leda Guzzi, médica infectóloga, integrante de la Sociedad Argentina de Infectología y de la International AIDS Society a Noticias Argentinas y agregó que «es un bacilo gram negativo intracelular facultativo, un colonizante de los ecosistemas acuáticos de aguas dulces, como lagos, ríos, arroyos, aguas termales, etcétera». Por lo tanto, indicó que «desde allí puede colonizar el agua de red de las ciudades»,

En esa línea afirmó que el riesgo más severo para los seres humanos se da cuando la bacteria coloniza el almacenamiento de los edificios importantes, mediante las torres que juntan el agua: «El microorganismo puede vivir dentro de estos sistemas de distribución de agua, por medio de supervivencia planctónica, una fase estacionaria de crecimiento», detalló y añadió que «a partir del ambiente puede pasar a colonizar los sistemas de distribución y almacenamiento de agua como así también los sistemas de refrigeración de aires acondicionados«.

Acerca de la manera en que se expande la Legionella, la doctora indicó que «cuando esas biopelículas por alguna razón se desagregan, por un cambio en el flujo del agua o por una cañería que estuvo cerrada por mucho tiempo, se generan aerosoles que pueden infectar a las personas» y puntualizó: «Hablamos de humidificadores, duchas, incluso una canilla». «A partir de allí, la bacteria puede acceder al pulmón», sostuvo.

Frente a ese panorama, señaló los tres factores que hay que considerar para entender el nivel de virulencia de esta bacteria. «Primero, la inmunidad del huésped, segundo la dosis infectante, y tercero la virulencia propia de la cepa bacteriana», precisó y explicó que «dependiendo de esos factores, se podría dar un cuadro leve, con fiebre de Pontiac, que muestra síntomas como gripales, pasando por diferentes estadíos o neumonías, llegando hasta la enfermedad del Legionario, una patología grave, que puede comprometer órganos fuera de los pulmones».

Acorde con la profesional, en el hemisferio sur la Legionella es una bacteria no tuvo una influencia importante, pero remarcó que hubo brotes a nivel general aunque de poca incidencia. «El más resonante fue en Carmen de Areco, en 2013″, recordó y añadió que «es una enfermedad de tipo esporádico, que está relacionada siempre con una fuente de infección». Por último, aclaró que «no es habitual en ámbitos domésticos, sino en grandes edificios, como hoteles, centros de recreación o instituciones de cuidado de salud».

CONTAGIO Y SÍNTOMAS

La médica indicó que se transmite de persona a persona al tiempo que subrayó que «no es eficiente, hay solo un reporte en la bibliografía» y tampoco circula como una pandemia porque «no tiene potencial epidémico que tiene el Covid o la viruela sísmica» por lo que «una vez que se controla, el brote se termina», afirmó.

En esa línea hizo hincapié en «la identificación de la Legionella no es fácil, sino que se requieren elementos sofisticados de diagnóstico» y recalcó que «suele descubrirse cuando aparece un brote de neumonía no aclarada». «Por ejemplo, en Tucumán tuvieron dos personas con neumonitis grave y ello alertó a las autoridades sanitarias y se trabajó al respecto», contó.

Sobre cómo se está abordando la Legionella en la Argentina, la experta marcó que «todavía estamos dentro del período de incubación» y destacó que «no están ingresando nuevos pacientes».  En ese punto, explicó que «el sanatorio está cerrado para iniciar la fase de investigación en el lugar» y sostuvo que «al no haber transmisión interhumana, se espera que los casos se extingan».

Por último, Guzzi detalló la manera en la que ocurren los contagios: «Se da a través de la inhalación de aerosoles contaminados de Legionella,  por aspiración de agua en los pulmones, que suele ser por error, porque el agua no debería llegar a los pulmones», desarrolló y sumó que «también se puede dar a través de sistemas de refrigeración de aire». «Lo importante es que siempre hay un nexo claro con una fuente de contaminación, no es que sucede porque sí», aseveró.

Para concluir acerca de cómo prevenir el contagio, la especialista brindó una serie de recomendaciones. «Tener una forma adecuada de mantenimiento de agua, sistema de clorado», indicó y remarcó que «si alguien tiene una canilla que no ha utilizado durante semanas, dejar correr el agua durante unos minutos y recién después usarla», además de «mantener limpios los grifos».

La Organización Mundial de la Salud (OMS) también otorgó ciertos consejos para evitar contraer esta bacteria:

-Seguir con los «controles de laboratorio, la identificación de los casos y la atención clínica».

– «Rastreo de los contactos, la investigación del brote para identificar la(s) fuente(s), la aplicación de medidas para prevenir nuevas infecciones y la mejora de las medidas de prevención y control de las infecciones».

Adecuado mantenimiento de las instalaciones y aparatos de refrigeración como también una correcta limpieza.

Colocar separadores de gotas a fin de disminuir la difusión de aerosoles.

– Mantener una buena concentración de agentes biocidas.

Tener limpios los sistemas de agua fría y caliente, chequeando al mismo tiempo que el agua caliente siempre esté en una temperatura superior a los 50°C y el agua fría abajo de los 25°C.

Achicar el estancamiento de agua.

Ingresa las palabras claves y pulsa enter.