El analista financiero y titular del grupo AdCap, Javier Timerman dialogó con Newsweek Argentina para analizar el impacto económico de los resultados de las PASO 2023 que, según su visión, resultaron sorpresivos incluso para los propios protagonistas.
“Desde el punto de vista político crea mucha incertidumbre. Es lo que solemos llamar “un cisne negro”, algo que no se puede predecir y que pasa muy pocas veces. A lo mejor no se predijo porque no se analizó bien la situación y no porque era un escenario imposible. Pero la realidad es que no estaba previsto por los analistas. En verdad, lo que no estaba previsto era principalmente la debilidad de Juntos por el Cambio de convertirse en una fuerza mayoritaria para las elecciones de octubre”, afirmó.
En ese sentido, explicó que los mercados estaban expectantes y, por ello, tuvieron una influencia menor en el desarrollo de estos comicios. “El mercado apostaba, pero lo hacía de una manera bastante más calma a como lo hizo antes de las elecciones de 2019, cuando el mercado estaba mucho más involucrado y había otro contexto macroeconómico global. Los resultados no fueron los que esperaron ese día de agosto de 2019. Esta vez, se especulaba con que Juntos por el Cambio incluso podía llegar a tener una diferencia de 10 puntos respecto al peronismo, dejando a Milei fuera de batalla. Milei siempre fue una figura que estaba para el tercer puesto, porque se iba a ir desinflando. Ese era el mejor escenario para el mercado. Pero eso no se dio, y ahora tenemos un escenario de tercios en el que puede pasar cualquier cosa. Para el mercado, ese “cualquier cosa” es “incertidumbre; y la incertidumbre tiene un costo. Y eso es lo que estamos viendo”.
¿Y qué es lo que sucedió este lunes, cuando los mercados abrieron a la baja y el dólar de devaluó (un 22% el oficial y el blue llegó a $700)? “Hoy algunas de las acciones argentinas estuvieron para arriba. El mayor efecto se vio en los bonos, que han caído un 6% o 7%. Lo que se está apreciando es el efecto de la incertidumbre respecto a qué puede pasar en octubre y también cómo se llega a octubre”, evaluó.
Según su visión como hombre de Wall Street y su experiencia en las numerosas y permanentes crisis argentinas, esa incertidumbre responde a la imprevisibilidad que representa Milei.
“Yo creo que el establishment, el mercado, el Fondo Monetario, lo que buscan es cierta previsibilidad en la política, porque los modelos económicos de Juntos por el Cambio y de Massa son diferentes, pero no necesariamente en todo, sino en algunas de sus variables, como los objetivos puntuales o la velocidad de implementación. En cambio, lo de Mieli es otra cosa, significa una disrupción que no se sabe qué consecuencias va a tener”, opinó.
Pero, ¿y ahora qué? “Hay diferentes interpretaciones”, responde, y detalla: “Unas van desde que esto es positivo porque debilita mucho al kirchnerismo duro; otros que dicen que la suma de Juntos por el Cambio y Milei hacen que haya una gran mayoría pro-mercado; y otros que creen que en un ballotage Mieli perdería, por lo tanto, hay chances de que Massa se convierta en presidente. Hay para todos los gustos. Si vos analizás hoy qué puede pasar, creo Bullrich y Massa tienen chances de ser presidente, y eso sería lo menos disruptivo de lo que se espera en este contexto”.
(Foto: redes sociales, via NA)
El problema, añade, es que “las elecciones no son hoy, sino en octubre” y, por lo tanto, no se sabe cómo esas cosas pueden influir en la decisión de la gente de apoyar con mayor o menor fortaleza a Milei”.
“Pueden pasar muchas cosas hasta entonces. Se están tomando medidas para contener la inflación y no sabemos cuál va a ser su impacto. Por un lado, la devaluación crea inflación, pero también te puede poner un ancla para empezar a reconstruir una macro que estaba claramente distorsionada. Entonces, es muy difícil pronosticar las chances que tiene cada uno de acceder al ballotage. Hoy escuchaba a expertos afirmar que es muy difícil que Milei no entre al ballotage, porque probablemente ningún votante de él se baje, como sí puede pasar con algunos de Juntos por el Cambio que no concuerden con Bullrich o con los peronistas que no apoyen a Massa”, sostuvo.
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Este escenario, afirmó, crea nuevas preguntas que pueden marcar la agenda hasta las generales: “¿Cuál va a ser la estrategia política de Bullrich? ¿A quién va a tratar de seducir? ¿Cómo va a competir en las elecciones? ¿Va a intentar sacarle votos a Milei o va a ir por el lado de afianzar los votos que pueda llegar a perder por parte de votantes más moderados? ¿Qué va a hacer Massa? ¿Va a tratar de sacarle votos a Patricia para entrar al ballotage y ganarle a Milei, que es un candidato antisistema? ¿O va a confrontar con ambos? Es muy temprano para todo”.
EL SENDERO ECONÓMICO
A todo esto, Massa sigue siendo el ministro de Economía y virtual primer ministro del Gobierno peronista, lo que abre grandes desafíos: ¿cómo sostener la confianza con la foto de un tercer puesto en las PASO?
“En los próximos meses vamos a tener un proceso inflacionario que se va a acrecentar en los dos primeros meses, que son los que quedan para las elecciones. Veo un contexto difícil para todos acá”, advirtió Timerman.
Para el experto en finanzas e inversiones, a Massa le fue mal, pero no tan mal como podría haberle ido con Bullrich en primer lugar. “Yo creo que uno de los miedos que debía tener Massa es que le pase lo que le pasó a Macri, que perdió las PASO de 2019 y el Fondo dejó de escucharlo, porque el poder pasaba por Alberto Fernández. Y Alberto Fernández tenía que opinar sobre el acuerdo, sobre el precio del dólar, porque iba a ser el próximo presidente. Con este resultado, Massa evitó ese escenario. Porque si JxC hubiese sacado 36 puntos a costa de Milei, obviamente iban a ser los miembros de JxC los interlocutores con el Fondo de aquí a octubre. Hoy Massa tiene chances y por eso sigue siendo el interlocutor”, describió.
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¿Y qué piensa el Fondo de Milei? ¿Es una figura confiable o con la que al menos se pueda trazar un plan serio? Timerman respondió: “Yo creo que para el Fondo Milei es un personaje controversial, y no lo veo al Fondo interactuando con él de manera cercana, como sí lo hubiera hecho con los referentes de JxC. Por eso creo que el FMI se va a mantener neutral o a intentar que el Gobierno llegue lo mejor posible a octubre”.
Finalmente, admitió que en los equipos de Milei también hay gente con experiencia. “Para negociar con el FMI se necesitan muchas relaciones, contactos, y probablemente el equipo de Milei tenga gente que en el pasado tuvo relación con el Fondo. Están Carlos Rodríguez, Roque Fernández, quienes seguramente puedan transmitir otro mensaje”, dijo, y concluyó: “De eso se va a tratar este mes y medio: cada uno usará la estrategia que le convenga en todos los aspectos. El problema es que este escenario no lo pensaban. No lo pensaban ni Bullrich, ni Massa, ni el propio Milei. Entonces, hoy no saben cuál es la mejor estrategia. ¿Es la mejor estrategia de Milei sentarse a discutir con el Fondo? Y…, tal vez no… Puede decirles ‘yo no discuto con el Fondo hasta que no sea presidente, yo hoy discuto con la casta’. No lo sé”.
