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Expertos exigen más estudios luego de casos de adolescentes con inflamación cardiaca tras vacuna
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Expertos exigen más estudios luego de casos de adolescentes con inflamación cardiaca tras vacuna

El hecho de que varios adolescentes hayan sufrido una inflamación cardiaca no fatal después de recibir la segunda dosis de la vacuna contra el covid-19 ha provocado que los funcionarios de salud revisen si los casos podrían ser un efecto secundario raro de la vacuna en adolescentes y adultos jóvenes.

Según un artículo publicado en línea en Pediatrics, siete adolescentes estadounidenses sufrieron una inflamación cardiaca después de la segunda dosis de la inyección de Pfizer, pero se requiere más investigación para demostrar que los casos están conectados con la vacuna. Ninguno de los muchachos, con edades entre 14 y 19 años, enfermó de gravedad, pero las pruebas con escaneo mostraron un tipo de inflamación del músculo cardiaco llamada miocarditis.

Todos recibieron la segunda dosis de Pfizer en abril o mayo. Todos se sintieron lo bastante bien para regresar a casa después de dos a seis días en el hospital y “les va muy bien”, según la Dra. Preeti Jaggi, especialista en enfermedades infecciosas de la Universidad de Emory y coautora del informe en Pediatrics.

El seguimiento continuo de Jaggi es necesario para monitorear los resultados de los siete muchachos, pero lo más probable es que la inflamación haya sido temporal. Solo uno de los siete muchachos en el informe de Pediatricstenía evidencia de una posible infección previa de covid-19 y los médicos determinaron que ninguno de ellos tenía un problema inflamatorio raro conectado con el coronavirus.

Los casos recuerdan los reportes israelíes de jóvenes diagnosticados después de recibir las dosis de Pfizer. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos alertaron a los médicos el mes pasado de que estaban monitoreando una cantidad pequeña de reportes de inflamación cardiaca en adolescentes y adultos jóvenes después de las vacunas de ARNm, el tipo hecho por Pfizer y Moderna.

Los CDC no han determinado si en realidad hay una conexión con las dosis, y sigue instando a todas las personas de 12 años y mayores a que se vacunen contra el covid-19, el cual es mucho más riesgoso que la vacuna. La vacuna de Pfizer está disponible para personas de hasta 12 años; la dosis de Moderna sigue siendo solo para uso en adultos.

Este tipo de inflamación cardiaca la puede provocar toda una gama de infecciones, incluido un episodio del covid-19, así como ciertos medicamentos, y ha habido reportes raros después de otros tipos de vacunaciones. Las autoridades tendrán que determinar si los casos después de la vacunación contra el covid-19 ocurren más a menudo que el “ritmo precedente” esperado.

Por ahora, los CDC dicen que la mayoría de los pacientes eran hombres, reportaron síntomas después de la segunda dosis y sus síntomas mejoraron rápidamente. “Pienso que estamos en el periodo de espera en el que necesitamos ver si esto es una causa y efecto o no”, dijo John Grabenstein, de la Coalición de Acción Inmunizadora y exdirector del programa de inmunización del Departamento de Defensa.

Un editorial de Pediatrics señaló que entre los niños estadounidenses menores de 18 años ha habido más de 4 millones de casos del covid-19, más de 15,000 hospitalizaciones y por lo menos 300 muertes.

El viernes los CDC reportaron que las hospitalizaciones relacionadas con el covid-19 de muchachos entre 12 y 17 años disminuyeron previamente este año, pero aumentaron de nuevo en marzo y abril. Las razones posibles incluyen la propagación de variantes nuevas del virus, más muchachos que regresan a la escuela, el relajamiento de las reglas sobre el uso de cubrebocas y la sana distancia, dijeron los investigadores de la agencia.

Aun cuando los muchachos infectados tienen menos probabilidades de enfermar de gravedad que los adultos, la información de los CDC sobre 200 hospitalizaciones en 14 estados muestra que una tercera parte de las personas fue tratada en unidades de cuidado intensivo.

El reporte no mencionaba alguna implicación cardíaca. La Dra. Rochelle Walensky, directora de los CDC, expresó que las hospitalizaciones suscitan preocupación e instó a los padres a vacunar a sus hijos.

“La vacunación es nuestra salida de esta pandemia”, declaró. El editorial de Pediatrics decía que los casos de inflamación cardiaca ameritan más investigación, pero añadió que “los beneficios de la vacunación contra esta enfermedad mortal y altamente transmisible superan por mucho cualesquiera riesgos potenciales”.

Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek

Publicado por: Mary Ellen Cagnassola / Newsweek Internacional

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