El primer ministro británico, Boris Johnson, admitió que el Reino Unido no tiene suficiente capacidad de prueba, pero dijo que el gobierno esperaba que la capacidad llegara a 500.000 pruebas por día para fines de octubre.
En este momento, el Reino Unido tiene una capacidad de prueba de alrededor de 300.000 por día, pero muchos han informado que no pueden ser evaluados, y algunos recurren a clínicas privadas.
Johnson dijo que entendía las frustraciones de la gente con el sistema de prueba, que ha hecho que algunos tengan que viajar millas lejos de casa para una prueba de COVID-19, pero afirmó que el 89 por ciento de las personas podrían obtener un resultado en 24 horas.
Hizo los comentarios mientras comparecía ante el Comité de Enlace de la Cámara de los Comunes, donde respondió preguntas sobre la respuesta del gobierno a la pandemia a medida que aumentaba el número de casos, lo que generó temores de una segunda ola de la infección en el país.
En la misma reunión, Johnson dijo que las consecuencias financieras de un segundo bloqueo a nivel nacional para combatir la propagación del COVID-19 serían desastrosas para el país.
El diputado conservador Julian Knight preguntó: «Con toda honestidad, primer ministro, ¿puede este país permitirse un segundo bloqueo nacional?»
Johnson respondió: «No quiero un segundo bloqueo nacional, Julian. Creo que sería completamente incorrecto para este país y vamos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para evitarlo y podemos pagarlo, dudo mucho que las consecuencias financieras fueran cualquier cosa menos desastrosas, pero tenemos que asegurarnos de vencer la enfermedad por los medios que nos hemos propuesto «.
Recientemente, el gobierno prohibió las reuniones sociales de más de seis personas y las personas atrapadas incumpliendo las reglas recibieron una multa de £ 100 (130 dólares) que puede duplicarse hasta un máximo de £ 3.200 (4.100 dólares).
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