El presidente Alberto Fernández participó este martes de la convención anual de la Cámara Argentina de la Construcción (CAMARCO), en donde volvió a referirse al atentado contra la vicepresidenta Cristina Kirchner y apuntó contra la oposición y los medios por los discursos de odio.
El mandatario destacó el encuentro realizado en la Casa Rosada tras el suceso, en el que representantes de los distintos sectores repudiaron lo ocurrido y reflexionaron sobre “la imperiosa necesidad de restablecer la convivencia democrática, desterrando la violencia de cualquiera de sus formas”.
“Todos los argentinos debemos, sinceramente, reflexionar sobre lo acontecido y contribuir, desde nuestro sitio, a una mejor convivencia entre todos. Cuidemos nuestras instituciones, protejamos a la democracia de todos aquellos que la desprecian, no son ellos o nosotros; somos todos y todas el pueblo de la Nación Argentina”, manifestó.
Desde La Rural, Alberto Fernández señaló que “la Argentina está lastimada” tras el intento de magnicidio, y que fue una “consecuencia de un milagro o de una falla mecánica” que el atacante no haya logrado su cometido. “Eso nos alienta hoy a poder reflexionar sobre lo ingrato del hecho, que deja al descubierto el tiempo en el que vivimos”, agregó.
“Hoy tenemos dos certezas que nos deparan algo de alivio, la primera es que Cristina está viva, la segunda es que quién empuño el arma asesina está detenido siendo investigado por la Justicia”, mencionó.
Al respecto de Fernando Sabag Montiel, acusado del hecho, explicó que “no es un monstruo escapado de alguna tierra lejana ni viene de otra galaxia ni nació marcado para ser asesino”, sino que es una persona que “se ubicó por fuera de los márgenes de la democracia, lleno de odio, de violencia y de rencor y rompió nuestro código de convivencia, nuestro pacto democrático”.
En ese sentido, el presidente habló sobre el impacto de los discursos de odio y apuntó contra los medios y la oposición por fomentarlos. Entre los ejemplos, puso el programa de Mirtha Legrand, las bolsas mortuorias colgadas en la Casa Rosada, y la acusación del fiscal Diego Luciani contra Cristina en la causa Vialidad que hizo que “dirigentes opositores hagan discurso impiadosos” y construyan “condenas sociales”.
“¿Cómo fue que ocurrió que los argentinos acabáramos por naturalizar tanta infamia? ¿Cómo fue que sucedió que la decrepitud de los discursos antidemocráticos acabara coaptando los espacios mediáticos y las redes sociales? ¿Cómo fue que un Diputado Nacional convoque al enfrentamiento de un pueblo, afirmando que son ellos o nosotros?”, manifestó.
Por eso, el mandatario pidió garantizar la convivencia democrática y no darle espacio “a los cultores del odio, a los que se valen de la libertad de opinar para difamar y desalentar al pueblo” y “siembran la violencia con el solo objeto de enfrentarnos”.
