La muerte de Alexei Navalni, el principal opositor del presidente de Rusia, Vladimir Putin, se convirtió en noticia en todo el mundo.
El analista internacional, Claudio Fantini, conversó con Willy Kohan en Radio Rivadavia y aseguró que «este es un hecho de impacto gigántesco en el mundo que, por un lado, no debiera sorprender a nadie pero sin embargo, no deja de ser un hecho sorprendente».
«No debiera sorprender a nadie porque Alexei Navalni era la principal figura en oposición a Vladimir Putin, y ya era conocido como opositor desde hace más de una década», indicó y precisó que «era miembro del partido liberal Yábloko, que es un partido opositor pero que después termina sospechosamente como parte del sistema: los que posan de opositores y en realidad no lo son del todo».
«Navalni se fue de Yábloko y creó una fundación, él era abogado especializado en investigaciones de corrupción», señaló y agregó: «Su fundación investigó los casos de corrupción más resonantes que se convirtieron en denuncias contra Vladimir Putin».
«El último fue la denuncia de los sobornos ultramillonarios que le permitieron a Putin construirse un palacio gigántesco en las costas del Mar Negro», detalló y recordó que «Navalni ya había sido envenenado en tres oportunidades».
«El más resonante fue el último. Ocurrió en Siberia, él se descompuso cuando regresaba en el avión a Moscú por lo que el avión debió volver y él quedó en un hospital», marcó y señaló que «Angela Merkel lo rescató y lo trataron en Alemania donde prácticamente llegó en estado de coma pero los médicos alemanes lo salvaron».
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Ante este panorama, hizo hincapié en que «el gran error de Navalni fue regresar a Rusia en el 2021», aseguró e insistió: «Fue un error gigántesco: lo detuvieron en el aeropuerto de Moscú y poco después estaba en una cárcel en Siberia con una pena de 19 años de prisión».
«A partir de ese momento, se temía que las horas o los días de Navalni estuviesen contados», recalcó y dejó en claro que «así terminan todos los que enfrentan o desafían a Vladimir Putin».
«La de Navalni son esas muertes que no debieran ocurrir porque tienen un solo sospechoso: Vladimir Putin», aseveró y marcó que «esta muerte parece agrandar la lista de víctimas de quien a esta altura ya está considerado una suerte de asesino serial: Vladimir Putin».
