Rusia se prepara para realizar una nueva misión a la Luna, la primera en 47 años, para intensificar su camino en la carrera espacial contra otras potencias.
Se trata de la misión Luna-25, que según informó la agencia espacial Roscosmos, será enviada el próximo viernes 11 de agosto. El viaje, se prevé, puede tardar entre “cuatro días y medio y cinco días y medio”,
El cohete Soyuz-2.1b ya fue ensamblado en el cosmódromo Vostochni, a unos 5.550 kilómetros al este de Moscú, y para su lanzamiento evacuará a todo un pueblo.
De acuerdo a la información oficial, los habitantes del asentamiento de Shakhtinskyi, en la región rusa de Jabárovsk, serán evacuador dado que en dicha zona caerían los cohetes propulsores.
Una vez llegue a la Luna, el módulo tendrá como objetivo “tomar muestras y analizar el suelo, así como llevar a cabo investigaciones científicas a largo plazo”, para analizar la estructura interna y explorar recursos.
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La última misión que Rusia envió a la Luna fue en 1976, llamada Luna-24, en épocas de la Unión Soviética. Esta fue la tercera que se realizó para recuperar muestras de suelo lunar.
(Con información de Reuters)
