Por Theo Burman, de Newsweek
ChatGPT se ha convertido rápidamente en una de las herramientas más utilizadas en el mundo.
Pocas empresas tecnológicas han logrado consolidarse en sus sectores, como Google con los motores de búsqueda o Apple con los smartphones, pero OpenAI lo ha logrado con, posiblemente, la tecnología más importante de la era moderna: la inteligencia artificial.
LA INTERFAZ DE LA IA
ChatGPT se ha consolidado como la IA generativa de referencia y, a partir de 2025, sigue siendo el chatbot de IA más utilizado del mercado, superando a otras marcas líderes de Silicon Valley como Google y Microsoft.
Su adopción generalizada, tanto en la vida cotidiana como en el sector privado, ha creado un nuevo mercado para las mejores indicaciones y frases para sacar el máximo provecho de la IA. LinkedIn y X, antes Twitter, están ahora llenos de creadores de contenido y profesionales, todos ellos prometiendo 10 sencillos consejos para obtener mejores respuestas de ChatGPT.
Una de las tácticas más populares para animar a la IA no se basa en el lenguaje adecuado ni en el formato del mensaje, sino en la cortesía del usuario.
Decir «por favor» y «gracias» a ChatGPT surgió principalmente como una forma de etiqueta social, combinada con la superstición de que algún día, una IA al mando podría saber si fuiste amable con ella o no.
¿CUÁNTO CUESTA SER CORTÉS?
¿Cuánto cuesta ser cortés con ChatGPT? Ilustración fotográfica de Newsweek
En una encuesta de 2024 en el subreddit oficial de ChatGPT, muchos usuarios dijeron que simplemente querían ser amables con el bot. Un usuario escribió: «Es básicamente un desperdicio, pero bueno, es bueno ser amable».
«Siempre soy amable por si las IA se apoderan del mundo, y espero que recuerden que siempre fui amable con ellas», escribió otra persona.
«Por supuesto que soy amable», añadió un comentarista. No tiene nada que ver con mi miedo irracional a que la IA tome el control. No pretendo en absoluto congraciarme con ella. Sería una tontería, ¿verdad?
SER CORTÉS VALE LA PENA
Existen pruebas que sugieren que decir «por favor» y «gracias» a ChatGPT puede proporcionar mejores respuestas a las consultas.
En un memorando sobre la creación de Copilot AI de Microsoft, el director del equipo de diseño, Kurtis Beavers, afirmó que ser cortés establece una agenda que las IA generativas imitan, lo que significa que si eres cortés y servicial, la respuesta también lo será.
«Usar un lenguaje cortés establece el tono de la respuesta», declaró Beavers a WorkLab. El sitio web de Microsoft también informó: «Usar una etiqueta básica al interactuar con la IA, según Beavers a WorkLab, ayuda a generar resultados respetuosos y colaborativos».
Añadió que la cortesía «no solo garantiza la misma amabilidad a cambio, sino que también mejora la capacidad de respuesta y el rendimiento de la IA».
Cómo la inteligencia artificial puede contribuir al cambio social
Las cifras respaldan esta filosofía. En 2024, una investigación de la Universidad de Waseda (Japón) con tres idiomas diferentes y diversas IA generativas reveló que ser grosero con las IA conllevaba una disminución del 30 % en el rendimiento, mientras que ser cortés reducía los errores y proporcionaba respuestas que proporcionaban más información de diferentes fuentes.
«Este fenómeno sugiere que los grandes modelos lingüísticos (LLM) no solo reflejan el comportamiento humano, sino que también se ven influenciados por el lenguaje, especialmente en diferentes contextos culturales», concluyó el informe. «Nuestros hallazgos resaltan la necesidad de tener en cuenta la cortesía en el procesamiento del lenguaje natural intercultural y el uso de los LLM», continuó.
EL COSTO DE LA CORTESÍA
Quizás los usuarios no piensen que «por favor» y «gracias» podrían aumentar significativamente los costos de procesamiento de ChatGPT. Al fin y al cabo, son solo tres palabras.
Pero Sam Altman, CEO de OpenAI, opina lo contrario. En respuesta a la pregunta de un usuario de redes sociales sobre cuánto se había gastado en electricidad para procesar «por favor» y «gracias», Altman estimó que fueron «decenas de millones de dólares bien gastados; nunca se sabe».
Si bien el comentario fue una broma, la cifra muestra el consumo de recursos que puede suponer incluso el más mínimo factor adicional en lo que respecta a los LLM.
En marzo, un informe del Instituto de Investigación de Energía Eléctrica estimó que hacer una pregunta a ChatGPT cuesta aproximadamente 10 veces más electricidad que hacer la misma pregunta a Google.
Los avances en el desarrollo de centros de datos que comenzaron en la década de 2020 han provocado un aumento drástico de las emisiones de CO2 de las grandes tecnológicas; tan solo Google informó que sus emisiones habían aumentado un 30 % en los últimos cinco años.
Las cifras de ChatGPT no son mejores: OpenAI produce 8,4 toneladas de CO2 al año y requiere 700 000 litros de agua dulce para entrenar su modelo GPT-3.
Estas exigencias medioambientales y las crecientes complicaciones hacen que los organismos de control ya estén haciendo sonar la alarma sobre el futuro desarrollo y adopción de ChatGPT y otras IA similares.
Andrea Miotti, fundadora y directora ejecutiva de ControlAI, una organización sin fines de lucro formada por expertos en seguridad de IA, declaró a Newsweek: «Ganadores del Premio Nobel, cientos de destacados científicos de IA e incluso los propios directores ejecutivos de las principales empresas de IA han advertido que la IA representa una amenaza de extinción para la humanidad. Las empresas de IA siguen adelante a pesar de este peligro, poniendo a todos en riesgo».
¿QUIÉN SE BENEFICIA?
Si bien la IA está afectando a algunas industrias con mayor rapidez que a otras, casi todos los sectores del sector privado se involucrarán en ella de una forma u otra.
A principios de 2025, un estudio de McKinsey reveló que el 92 % de las empresas planeaban aumentar sus inversiones en IA, y los LLM eran el principal foco de estas expansiones.
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Como resultado, muchas empresas buscan a los grupos de personas con mayor probabilidad de aprender a aprovechar al máximo la IA.
Mantas Lukauskas, director de tecnología de IA en Hostinger Global, declaró a Newsweek que las generaciones más recientes en incorporarse al mercado laboral serían las más indicadas para aprender nuevos trucos con la IA. «Las generaciones más jóvenes, en particular la Generación Z y los millennials, son las más dispuestas a adoptar la IA en el ámbito laboral», afirmó Lukauskas.
Continuó: «En entornos dinámicos y tecnológicamente avanzados, como las startups o las agencias creativas, la IA se considera un impulsor de la productividad y un generador de ideas. Por el contrario, las generaciones mayores y los entornos laborales más tradicionales, como el gobierno, la educación o las industrias tradicionales, tienden a ser más escépticos.
«Las preocupaciones van desde la posibilidad de que la IA sustituya puestos de trabajo hasta la desconfianza en la toma de decisiones automatizada. La oportunidad reside en plantear la IA como una herramienta colaborativa que mejora, en lugar de sustituir, la experiencia humana».
Publicado en cooperación con Newsweek Internacional
