Bahía Blanca es ahora una ciudad «pet- friendly», lo cual significa que los bares y restaurantes permitirán el ingreso de los perros y gatos que acompañen a sus clientes. La medida fue aprobada de manera unánime por el Consejo Deliberante y establece que cada espacio gastronómico decidirá si quiere sumarse o no a la resolución.
En el caso de que opten por adherirse, tendrán que disponer de una infrasestructura apta para los animales y también con el recurso humano necesario. A fin de incentivar a los locales, el municipio otorgará un beneficio fiscal a aquellos que se sumen, que consiste en que se les deducirá el importe de la Tasa de Seguridad e Higiene, igual a tres módulos de Servicios Especiales de Limpieza por mes.
El precio lo establecerá la Ordenanza Impositiva del año en cursos y sus modificaciones, si llegara a haberlas, con el objetivo de que puedan obtener las bolsas de residuos para que los clientes recojan las necesidades de los animales.
En este punto, el secretario de la municipalidad, Pablo Romero, conversó con Telefé Noticias y se refirió a las diferencias que hubo en el Consejo sobre la implementación de incentivos fiscales.
«En un principio se habló de tres módulos de la tasa de Seguridad e Higiene que se va actualizando cada vez que se aprueba la Fiscal e Impositiva en el Concejo Deliberante; esos módulos van cambiando de monto, pero hubo una pequeña diferencia con eso», y añadió que «después se habló de que ese beneficio sea para siempre y después intentamos que la reglamentación sea por seis meses a los efectos de que el comerciante pueda disponer, en el local que adhiera a este programa, bolsas de residuos que sirvan por si los perros o los gatos hacen sus necesidades».
Por otra parte, recordó que «en Bahía Blanca ya hay una ordenanza que es la 13.948 que habla de la tenencia responsable de las mascotas, con lo cual cualquier situación que se de en la vía pública es la misma circunstancia que debemos tener en cuenta dentro de un local gastronómico», y agregó que «lo importante que figura en algunos artículos es que el dueño del comercio que adhiere al programa puede usar el derecho de admisión».
Esto último significa que si el dueño de un negocio considera que el animal tiene un tamaño muy grande para estar en el local o que por algún motivo representa un peligro para los demás comensales, tiene derecho a no permitirle el ingreso.
Para concluir, destacó que «estamos muy contentos porque, más allá de los trámites administrativos, lo importante es que Bahía Blanca sea pionera en este tipo de practicas ciudadanas, respecto de cómo nosotros nos manejamos con las mascotas».
CÓMO SER UN LOCAL PET- FRIENDLY
Los negocios tendrán que completar un formulario y mandarlo a la Oficina de Habilitaciones Comerciales. En el papel deberán colocar los siguientes datos: nombre del titular o apoderado del local, número de CUIT, razón social del establecimiento, dirección, declaración de intención de sumarse a la iniciativa, declaración del espacio con el que cuenta para que los clientes y los animales convivan en forma conjunta y teléfono de contacto.
