El Gobierno debería poder explicar cosas con tranquilidad y sensatez. El problema es que Javier Milei tiene un estilo que puede gustar o no (a mí no me gusta). Pero hay cosas que requieren explicaciones serias y no alcanza con que todo el oficialismo copie los dichos del presidente.
Me refiero a que es muy importante que no haya déficit fiscal (el Gobierno lo sostiene y yo sí estoy de acuerdo). Sin embargo, hay que explicar cómo se llega a ese objetivo. Por ejemplo, no hay ajuste sobre los planes sociales y sí lo hay sobre los jubilados. Es obvio que es una situación complicada porque el kirchnerismo se dedicó a romper el sistema con jubilados sin aportes. Ahora, si la situación es esa, alguien debería explicar cuál es el plan del Gobierno para los jubilados.
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Los jubilados con aportes son un tema complejo porque es gente que ya puso el dinero y ahora está en una situación complicada. Yo sé que al oficialismo le resulta difícil, pero debería poder explicar el plan. Explicar por qué es importante no tener déficit y, sobre todo, tener empatía con un sector que la pasa mal luego de haber aportado toda la vida.
No sirve insultar ni enviar a iletrados como la diputada Santillán cuando son temas delicados como las jubilaciones o la salud. Mandar a los medios a los personajes farandulescos que trabajan de diputadas es un daño que el Gobierno se hace a sí mismo y que le hace mal a la política en general. El único dato que se ha visto claro en las últimas elecciones ha sido la alta abstención: es lógico que haya gente que la pasa mal no vaya a votar ante el nivel de idiotez de algunos representantes.
Llenar las listas de impresentables tiene ese riesgo. Ya han probado hasta el infinito con los impresentables. Sería bueno para el Gobierno que empiece a aparecer gente seria y, sobre todo, empática con la situación de quienes la pasan mal. Ya estuvo bien de gente bizarra hablando de lo que no sabe.
(Columna emitida originalmente en el programa «Cristina sin vueltas», conducido por Cristina Pérez en Radio Rivadavia).