El cónclave para elegir al nuevo Papa comenzará el 7 de mayo, pero hay un cardenal que los obispos esperan que de un paso al costado y no asista. Quién es y por qué se espera que se mantenga aparte.
Se trata de Angelo Becciu, quien fue condenado por irregularidades financieras en la compra de un departamento en Londres, en Sloane Avenue, una antigua sede de las galerías Harrods en el prestigioso barrio de Chelsea.
Además salieron a la luz donaciones de 125 mil euros que el cardenal colocó en la cuenta de una asociación vinculada a la Cáritas sarda de Ozieri, su lugar de orígen, y cuyo titular en ese momento era uno de sus hermanos.
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Ante esta situación, Luis Argüello, presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y arzobispo de Valladolid, fue claro al afirmar que lo más adecuado sería que Becciu no integre el cónclave que escogerá al sucesor de Francisco.
«Lo mejor sería que el propio cardenal Angelo Becciu renunciara», manifestó
Y en diálogo con Cadena 3 precisó: hay un plano «jurídico-canónico» y otro «más espiritual y de sentido común».
Si bien la condena al cardenal «está todavía en apelación» y por lo tanto «no es firme», consideró que sumarse al cónclave «seguramente no sea lo más oportuno» debido al panorama actual.
Francisco le retiró «sus derechos asosciados al cardenalato en 2020» y firmó dos cartas mecanografiadas en la que señaló que lo más prudente sería excluir a Becciu del cónclave.
QUÉ DIJO BECCIU
Pese a la determinación de Francisco, Becciu insiste con formar parte del cónclave.
«El Papa reconoció mis prerrogativas cardenalicias como intactas ya que no hubo voluntad explícita de excluirme del cónclave ni petición de mi renuncia explícita por escrito», sostuvo al diario Unione Sarda.
