El presidente de Estados Unidos Donald Trump ajusta su iniciativa para Gaza ante la oposición de los países árabes, que rechazan el traslado de los palestinos hacia Egipto y Jordania.
Stevie Witkoff, amigo personal del mandatario norteamericano y su enviado especial para Medio Oriente, desempeñó un papel fundamental en la negociación de la tregua entre Israel y Hamas tras 15 meses de combate en Gaza.
A pesar de las advertencias del primer ministro Benjamín Netanyahu, Witkoff visitó recientemente la Franja y regresó impactado a Washington. «Nunca he visto nada parecido», le confesó a Trump, y agregó que la reconstrucción de Gaza podría tardar «al menos 10 o 15 años».
El anuncio de Trump, que plantea que Estados Unidos tomará el control de Gaza para convertirla en la «Riviera del Medio Oriente«, generó el rechazo inmediato de Arabia Saudita, Turquía, Egipto y Jordania, además de la oposición expresa de Hamas.
«La iniciativa de Trump es una receta para el caos y la tensión en la región», advirtió Sami Abu Zuhri, vocero de la organización terrorista. «Nuestro pueblo en Gaza no permitirá que estos planes se hagan realidad», agregó.
Arabia Saudita rechazó la idea de Trump de controlar la Franja de Gaza
El primer ministro saudí, Mohamed bin Salmán, rechazó el traslado forzoso de los casi dos millones de palestinos que viven en Gaza, exigió que Israel reconozca al Estado palestino y defendió la tregua, que se ha vuelto más frágil tras la propuesta de Trump.
Acompañado por el presidente de Egipto, Abdel Fattah al-Sisi, y el rey de Jordania, Abdalá II, Bin Salmán busca un consenso regional que equilibre el poder de Irán y reduzca las tensiones en la Franja.
En un intento por suavizar las críticas, la vocera de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, junto con el secretario de Estado Marco Rubio y el consejero de Seguridad Nacional Mike Waltz, aclararon que el plan de Trump implica una reubicación «temporal» de los palestinos.
«El presidente ha dejado en claro que Gaza no es un lugar habitable en este momento», afirmó Leavitt, marcando una diferencia con declaraciones previas de Trump, quien había hablado de una reubicación «permanente». Además, aseguró que Estados Unidos no financiará la reconstrucción de Gaza, en un esfuerzo por calmar las preocupaciones de los contribuyentes estadounidenses.
Para avanzar en su iniciativa, Trump recibirá en la Casa Blanca al rey Abdalá II de Jordania y al presidente de Egipto, Abdelfatah El-Sisi. El líder estadounidense espera lograr el respaldo de Arabia Saudita, Egipto y Jordania.
