Irán justificó los ataques a la base militar de Estados Unidos en Qatar, asegurando que se trató de una “legítima defensa” que no incumplió ningún derecho internacional.
Luego de las agresiones del gobierno de Donald Trump a sitios nucleares, el régimen iraní decidió responder con un bombardeo a la base estadounidense Al Udeid, donde no se registraron muertos ni heridos.
Al respecto, Esmail Baqaei, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, aseguró que estos ataques “se llevaron a cabo en ejercicio del derecho inherente a la legítima defensa, amparado por el Artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas”.
El funcionario consideró que el bombardeo de Estados Unidos a los sitios nucleares de Natanz, Isfahán y Fordow atentaron “contra la integridad territorial y la soberanía nacional de Irán”.
Trump aseguró que Irán le avisó que iba a atacar una base de EEUU en Qatar
Sin embargo, remarcó que “esta acción defensiva no debe interpretarse en ningún caso como dirigida contra el país amigo y vecino de Qatar”, con el que Irán busca mantener su buena relación.
“Estamos decididos a no permitir que las acciones agresivas y las políticas maliciosas de Estados Unidos y el régimen sionista contra Irán provoquen sedición y división entre nosotros y nuestros hermanos en la región”, enfatizó Baqaei.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Abbas Araghchi, envió una carta al secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, y al presidente del Consejo de Seguridad para pedir que condenen los ataques de Estados Unidos.
El fuego no cesa: Israel denuncia que Irán violó el acuerdo y responderá a los ataques
En su misiva, manifestó que las recientes agresiones violan el derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas. Además, remarcó que los ataques contra instalaciones nucleares “están explícitamente prohibidos en numerosos documentos internacionales”.
“La acción imprudente de Estados Unidos no sólo representa una clara violación de la paz y la seguridad internacionales sino que también entraña graves riesgos humanitarios y ambientales”, expresó.
Araghchi también apuntó que este hecho “señala un deterioro sin precedentes de las relaciones internacionales, podría tener consecuencias catastróficas, como numerosas víctimas civiles y una devastación ambiental a largo plazo”.
“El gobierno estadounidense debe rendir cuentas por este ataque criminal, perpetrado en apoyo de un régimen liderado por un criminal de guerra procesado internacionalmente, que está llevando al mundo al caos y la inestabilidad”, manifestó acusando también al primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu.