Greta Thunberg fue deportada de Israel este martes, junto con otros activistas con los que intentaba llegar a la Franja de Gaza para entregar ayuda humanitaria en el barco Madleen.
Según informó el Ministerio de Exteriores israelí, la activista sueca fue enviada de regreso a su país desde el aeropuerto de Ben Gurion, en un vuelo con conexión en Francia.
Thunberg era una de los 12 integrantes de la tripulación del barco Madleen, de la Flotilla de la Libertad, el cual fue interceptado por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) para que no pudiera llegar al enclave con comida y otras ayudas para la población civil.
Algunos de los activistas serán expulsados “en las próximas horas”, mientras que las autoridades advirtieron que “aquellos que se nieguen a firmar los documentos de deportación y abandonar Israel serán llevados ante una autoridad judicial, acorde a la ley israelí, para autorizar su deportación”.
Israel Katz, ministro de Defensa israelí, felicitó a las fuerzas de seguridad por la “rápida y segura captura de la flotilla” para impedirles “romper el bloqueo”.
El funcionario reveló que les mostraron videos con “los horrores de la masacre del 7 de octubre”, pero que algunos “cerraron los ojos a la verdad y una vez más demostraron que prefieren a los asesinos sobre las víctimas”.
“Es apropiado que la antisemita Greta y sus compañeros simpatizantes de Hamás vean exactamente a qué organización terrorista vinieron a apoyar y para quién trabajan, qué atrocidades cometieron contra mujeres, ancianos y niños, y contra quién lucha Israel para defenderse”, enfatizó Katz en un posteo de X.
