El parlamento (Knesset) de Israel debatirá este miércoles la destitución del primer ministro, Benjamin Netanyahu. ¿Cómo es el proceso?
Luego de una reunión de de los partidos opositores en la Knesset, se publicó un comunicado oficial que precisa: «En coordinación entre todas las facciones, se decidió retirar la legislación de la oposición de la agenda para concentrar todos los esfuerzos en un solo objetivo: derrocar al gobierno».
El oficialismo cuenta con 68 legisladores sobre un total de 120 bancas y para sacar a Netanyahu de su cargo, necesita 61 votos.
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Se precisan, como mínimo, tres votaciones consecutivas, con 61 votos cada una, para que el primer ministro sea destituído.
Los partidos ultra ortodoxos Shas y Judaísmo Unido de la Torá, pese a ser aliados de Netanyahu, comunicaron que respaldarán la primera votación para que el ministro sea apartado de sus funciones.
A eso hay que sumarle, los más de 45 votos de los legisladores de la oposición.
Si se logran esas tres votaciones, en los próximos 90 días, el Gobierno debe convocar a elecciones.
Netanyahu está siendo investigado por tres casos de corrupción.
Además de esas investigaciones, los dirigentes ultraortodoxos se oponen a que el primer ministro siga en el poder, debido a que, no logró exceptuar del servicio militar obligatorio a los estudiantes de la Torá y el Talmud.
Por su parte, la oposición está en contra de la estrategia que Netanyahu lleva adelante en la Franja de Gaza para lograr la liberación de los 56 rehenes que Hamás mantiene en el enclave.
