El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, negó las acusaciones de Kilmar Ábrego García, el inmigrante deportado por error por la administración de Donald Trump, quien denunció haber sufrido torturas en el CECOT.
“Aparentemente, cualquier afirmación de un criminal es aceptada como cierta por los grandes medios de comunicación y el debilitado sistema judicial occidental. Pero el hombre no fue torturado ni perdió peso”, escribió el mandatario en su cuenta de X.
En la declaración judicial presentada ante la Justicia de Estados Unidos, los abogados de Ábrego García aseguraron que “fue sometido a torturas físicas y psicológicas, incluyendo palizas, privación del sueño, hacinamiento extremo, mala alimentación, amenazas y exposición constante a luces brillantes”.
También dijeron que “estaban confinados en literas de metal sin colchones en una celda superpoblada sin ventanas”; que “fue sometido a humillaciones y amenazas constantes por parte de los guardias”; y que su salud se deterioró, haciendo que pierda casi 14 kilos.
Sin embargo, Bukele compartió un video en las redes sociales con imágenes que, según él, desmienten todas estas versiones. “De hecho, las fotos muestran que ganó peso durante su detención”, afirmó.
“Hay abundantes imágenes de diferentes días, incluyendo su reunión con el senador Van Hollen, quien confirmó que el hombre parecía estar bien. Si lo torturaron, lo privaron de sueño y lo dejaron morir de hambre, ¿por qué se ve tan bien en todas las fotos? ¿Por qué engordó? ¿Por qué no tiene moretones ni ojeras?”, argumentó.
Apparently, anything a criminal claims is accepted as truth by the mainstream media and the crumbling Western judiciary.
But the man wasn’t tortured, nor did he lose weight. In fact, photos show he gained weight while in detention. There’s plenty of footage from different days,… pic.twitter.com/PzvLcCNzrK
— Nayib Bukele (@nayibbukele) July 3, 2025
Tras pasar varias semanas detenido en el CECOT, Kilmar Ábrego García volvió a los Estados Unidos luego de que la administración de Trump admitiera que fue deportado por un “error administrativo”, ya que contaba con protección legal para no ser enviado a El Salvador.
Actualmente, continúa detenido en una prisión de Nashville, ya que afronta cargos por ser presuntamente miembro de la pandilla Mara Salvatrucha y estar implicado en el delito de transporte ilegal de extranjeros indocumentados. Sus abogados desmienten estos cargos.