El Centro de Investigación en Finanzas (CIF) de la Universidad Torcuato Di Tella difundió su último informe sobre el Índice Líder (IL), un indicador que busca anticipar cambios de tendencia en la actividad económica. Los últimos datos muestran una leve recuperación que convive con un nivel elevado de probabilidad de recesión y señales de enfriamiento en la economía real.
El documento señala que “el Índice Líder (IL), que busca anticipar cambios de tendencia en el ciclo económico, sube 0.11% en su versión desestacionalizada durante julio de 2025”. El número cortó una racha negativa tras las bajas de mayo (-0,32%) y junio (-1,60%), pero se mantiene en un nivel modesto frente al rebote que esperaba parte del mercado.
El índice se ubicó en 127,87 puntos con un crecimiento interanual de 6,48% respecto de julio 2024. Sin embargo, la visión no es completamente optimista: el informe admite que la serie tendencia-ciclo, que busca eliminar el ruido de corto plazo, mostró un retroceso de 0,27%. Según el reporte: “La serie de tendencia-ciclo se ubica en 129.42 puntos en julio de 2025 (2004=100). Esto representa una caída de 0.27% respecto del mes anterior”.
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La preocupación central está puesta en el riesgo de que la economía abandone su fase expansiva. El informe lo resume de forma clara: “La probabilidad de salir de la fase expansiva de la actividad económica durante los próximos meses se ubica en 56.16%”. El dato implica que más de la mitad de las proyecciones apuntan a una eventual entrada en recesión, un escenario que -de todas formas- en junio era mayor y se ubicaba en un 57,08%.
En otras palabras, aunque julio trajo una mejora en el índice general, no se muestra una señal firme de consolidación. El estancamiento en la actividad económica junto a los números del Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE)— parece confirmarlo. Los datos desestacionalizados del EMAE, mostraron una caída de 0.58% durante mayo de 2025, según estos números.
Desagregado por sectores
El Índice de Difusión (IDCIF), que mide cuántos de los componentes presentan variaciones positivas en simultáneo, se recuperó al 70% en julio, después de dos meses flojos en los que se había ubicado en 40%.
“Esto quiere decir que de las diez series que componen el Índice Líder, siete presentan variaciones positivas significativas: S&P BYMA Índice General en términos reales, S&P BYMA Merval en términos reales, el Índice de Confianza del Consumidor, los despachos de cemento, el precio de la soja FOB, las ventas a concesionarios y el Índice de Producción Industrial de Industrias Metálicas Básicas medido por FIEL” afirman.
El Índice Líder del CIF se publica todos los meses y está diseñado para anticipar tendencias en la economía, tomando como referencia al EMAE que elabora el INDEC. Al respecto, el documento explica que “el ILCIF está construido para resumir y revelar los puntos de giro en el nivel de actividad económica representada por el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) en una forma más clara y convincente que cada uno de sus componentes porque suaviza las volatilidades propias de cada uno de ellos”.
El indicador utiliza diez variables que incluyen desde precios de activos financieros hasta indicadores industriales y de consumo. Para suplir los rezagos en la disponibilidad de datos, se aplican métodos estadísticos que permiten proyectar los componentes faltantes.
Para algunos analistas, el rebote leve que mostró el mes de julio no alcanza para descartar un escenario de fragilidad. La secuencia de los últimos tres meses (caídas en mayo y junio, más el alza mínima en julio) deja un promedio que sigue siendo débil. Entre otros motivos, el alto costo del crédito limita el acceso al financiamiento para las empresas, lo que dificulta sostener costos operativos y pensar en la posibilidad de invertir.
