Luis Caputo dejó lo que el mercado leyó como una señal al compartir en su cuenta de X un artículo del reconocido economista Nouriel Roubini. En el texto, el analista elogió el programa económico de Javier Milei y trazó un pronóstico optimista para la Argentina, aunque advirtió que el régimen cambiario deberá flexibilizarse con el tiempo.
El documento titulado “Argentina está en camino al éxito económico”, circuló con fuerza en las últimas horas entre los analistas. Y no fue específicamente por el tono favorable, sino porque Roubini plantea un punto clave: la importancia de avanzar hacia un esquema cambiario más flexible.
Vale la pena leer este oped de Nouriel Roubini. 🇦🇷🇦🇷@Nouriel.https://t.co/C4A8bzK97X
— totocaputo (@LuisCaputoAR) November 3, 2025
“El pueblo argentino prefiere un sacrificio económico a corto plazo a un retorno a las políticas peronistas”, escribió el economista, al interpretar los resultados de las elecciones legislativas de octubre, y agregó que “Milei ahora tiene vía libre para culminar lo que comenzó”.
Antes de ese diagnóstico político, Roubini recordó que “en vísperas de las elecciones legislativas argentinas de este mes, los comentarios sobre las perspectivas económicas y financieras del país se tornaban cada vez más pesimistas”. “Con una cantidad significativa de deuda externa que vence el próximo año —agregó—, la opinión generalizada era que un programa de estabilización cambiaria había conducido a una moneda enormemente sobrevalorada y a un déficit externo que inevitablemente precipitaría una crisis. Sin embargo, tras haber escrito un libro sobre crisis cambiarias en mercados emergentes y haber seguido de cerca las políticas argentinas, consideré que este consenso estaba muy equivocado”.
Así destacó que el Gobierno de Milei rompió con los intentos fallidos del pasado —incluidos los de administraciones argentinas previas como las de Carlos Saúl Menem (1989-1999) y Mauricio Macri (2015-2019)—, “el presidente argentino Javier Milei aprovechó su victoria electoral de 2023 para implementar las políticas de austeridad fiscal y reforma estructural más severas de la historia del país. En 2024, el ajuste fiscal primario (excluidos los pagos de intereses) ascendió al 5% del PIB, lo que sentó las bases para una fuerte recuperación económica tras un inicio de desaceleración”.
Según el, en este proceso el peso “podría haber sobrevalorado, dada la falta de un régimen cambiario totalmente flexible”.
Y fue más allá al decir que si el país recuperaba el acceso a los mercados, podría refinanciar su creciente deuda externa; y que si se superaban las incertidumbres electorales, “las reformas de Milei y la enorme riqueza en recursos naturales del país atraerían sin duda grandes cantidades de inversión extranjera directa”
El economista analizó que el problema de Argentina radica en la liquidez, no en la solvencia.
De este modo, responsabilizó a la incertidumbre electoral por la inquietud entre los inversores pero también a escándalos de corrupción y los “errores tácticos de Milei” que llevaron a depreciar el peso, a la suba las tasas de interés y del riesgo país en un contexto de caída para los activos locales entendiendo que si “los peronistas conseguían suficientes escaños para ejercer un veto efectivo, todo el programa de reformas de Milei podría fracasar”.
My new op-ed on Argentina. “Argentina Is on a Path to Economic Success” by Nouriel Roubini @ProSyn https://t.co/x0YSGxaLJ9
— Nouriel Roubini (@Nouriel) November 3, 2025
Aun así, consideró que el presidente logró sostener el rumbo con el triunfo de las elecciones legislativas y el apoyo estadounidense.
En su lectura del nuevo escenario, anticipa que “Milei buscará ahora el apoyo de otras fuerzas moderadas para formar una coalición que pueda dar continuidad a su programa mediante legislación, en lugar de decretos, comenzando con reformas laborales y fiscales”. En este escenario proyectó que se avance en una mayor liberalización económica atraerá lo que aumentaría la inversión y podría garantizar el crecimiento económico.
El tramo que más resonó entre los analistas —y por la recomendación pública de Caputo— fue la reflexión de Roubini sobre el tipo de cambio: “Sí, el régimen cambiario tendrá que flexibilizarse con el tiempo” dijo.
Al poner el tema en agenda, resaltó que «las propuestas para un cambio inmediato a un tipo de cambio totalmente flotante o (en el extremo opuesto) a la dolarización total carecen de sentido». Así, la posibilidad de que el dólar flote libre es objeto de críticas por la volatilidad excesiva del tipo de cambio que podría generar el esquema y sobre la dolarización consideró que no es viable dado que Argentina no cuenta con suficientes dólares.
De este modo y conforme a su análisis, la mejor opción sería un régimen cambiario que permita fluctuaciones dentro de una banda amplia porque podría limitar la volatilidad y garantizar que el valor de la moneda sea competitivo.
En su lectura el mercado ya está respondiendo en esa dirección: “La reacción del mercado a las elecciones de octubre confirma que los inversores respaldan la estrategia de Milei. El pánico previo a la jornada electoral no giraba en torno a él, sino a la posibilidad de un regreso del peronismo. Superada la reciente incertidumbre electoral, Argentina tiene ahora un camino claro hacia la estabilidad política”.
La lectura del analista –además de validar el rumbo económico del Gobierno, deja dudas sobre lo que podría ser el próximo movimiento: ampliar las bandas cambiarias, un paso que el mercado todavía espera y que Caputo niega, aunque con la recomendación del analista internacional, parece empezar a preparar.
Aunque Roubini traza un balance positivo del programa económico y proyecta el ingreso de inversión extranjera junto a una etapa de crecimiento, su análisis deja abierta la gran pregunta que domina a los inversores: cuál será el momento y el alcance de la corrección cambiaria.
El Gobierno enfrenta un mes clave: deuda, dólar y tasas en la mira
