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Brasil logró la inflación más baja en 42 años y Argentina podría tener la más alta en 40
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Brasil logró la inflación más baja en 42 años y Argentina podría tener la más alta en 40

 Brasil tuvo en julio una inflación del 0,68%, logrando así el número más bajo desde 1980, es decir, hace 42 años.

El dato, dado a conocer por el instituto de estadísticas oficial (IBGE) y difundido por Noticias Argentinas, refleja que se trata de la primera disminución de la inflación desde mayo del 2020. En junio pasado, la cifra había sido 0,67%, alcanzando así 11,89% en un año.

Según el texto del Gobierno de Jair Bolsonaro, «la tasa de julio fue influenciada principalmente por el sector de Transportes, que tuvo la caída más intensa (-4,51%), y contribuyó con el mayor impacto negativo (-1,00 punto porcentual) en el índice». La baja en ese rubro obedece a la disminución del precio de los combustibles (-14,15%) en ese lapso.

Además, el presidente brasileño llevó adelante una reducción de los impuestos estatales que influyeron en esa caída de la inflación. A su vez, la empresa estatal Petrobras efectuó distintos recortes luego de que el jefe de Estado cambiara por tercera vez a fines de junio a su presidente, debido a las críticas por la política de precios de la firma.

Otra baja se dió en la energía eléctrica residencial (-5,78%), a raíz de una disminución de las tarifas y de los gravamenes.

La caída de los precios en julio situó a la tasa en los primeros siete meses del año en 4,77%, número que se aproxima al que tiene previsto el Banco Central  para este año que es el 5%. Además, la cifra del mes pasado fue menor a la mediana estimada en -0,65% de alrededor  de 40 instituciones financieras y consultoras relevadas por el diario Valor, especializado en economía.

No obstante, los alimentos y bebidas sí subieron y llegaron al 1,30%, como consecuencia, entre otras cuestiones, del ajuste del 25,46% de la leche larga vida. Es así como el sector alcanzó el 14,72% en un año.

DEFLACIÓN EN BRASIL: QUÉ SIGNIFICA

En una charla con María Laura Santillán en LN+, el periodista argentino, Gustavo Segre, que reside en Brasil, explicó que el país, gobernado por Bolsonaro, tuvo «deflación, es decir, inflación negativa» y destacó: «0,68, la cifra más baja en 42 años». El diputado de Avanza Libertad y economista, José Luis Espert, que se encontraba en el piso, recalcó que «ellos tienen la más baja en 42 años y nosotros vamos a tener la más alta en 40».

Segre retomó la palabra y precisó que para lograrlo, la nación limítrofe «bajó el gasto público para conseguir superávit fiscal» o sea que «el gobierno debe gastar menos de lo que recauda». Además, para alcanzar el superávit fsical, remarcó que «el ministro de Economía bajó impuestos y al bajar impuestos logró que más gente pueda involucrarse en la actividad económica porque cuando bajás el impuesto, baja la carga tributaria, baja el precio final de ventas. Entonces, la gente consume más», debido a que, «con los mismos sueldos que ganaba consigue consumir más de lo que consumía antes» y resaltó que «así se entra en un circuito virtuoso».

Como otro elemento, recalcó que «aumentó la tasa de interés, que está en términos positivos reales» y explicó que «esto es que está por arriba del índice de inflación». Ese incremento, según indicó: «Generó, de alguna manera una reducción en la demanda, porque a  la gente que no le alcanza la plata, la cuota del crédito le sale más alta y aquel que tiene la plata guardada, prefiere no gastarla para consumir el mismo bien dentro de un tiempo y que le sobre plata, además de la compra que hizo».

CONTRACARA: ARGENTINA PODRÍA TERMINAR EL 2022 CON UNA INFLACIÓN DEL 85%

El economista Gabriel Zelpo anticipó que la inflación de julio en Argentina «se ubicará alrededor del 7,5%», al tiempo que recalcó que la medición interanual al terminar el 2022 estará «cómodamente arriba del 85%».

En una entrevista al programa ATP de la Radio online TU, el profesional detalló que «la inflación de julio, probablemente esté en el orden del 7,5%.» e hizo hincapié en que «es un registro destacable, porque en ese mes no hubo una suba de tarifas fuerte ni tampoco el tipo de cambio oficial saltó con todo»

En esa línea sostuvo que el aumento en el costo de vida tuvo lugar a raíz de que «los dólares paralelos subieron y por eso aumentaron muy considerablemente las expectativas de inflación» y añadió que «al mismo tiempo que hubo una remarcación fuertísima de un conjunto de precios en los bienes durables».

Por lo tanto, subrayó que «hablamos de casi 20 puntos en un mes» y detalló que «eso fue lo que metieron algunos ítems como electrodomésticos y televisores».

 

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