Lo debía ser una noche de fútbol entre Independiente y Universidad de Chile para definir los octavos de final de la Copa Sudamericana terminó convirtiéndose en una batalla campal con destrozos, violencia y heridos de gravedad en el estadio Libertadores de América.
Todo comenzó con algunos cruces entre los hinchas del conjunto chileno, quienes se ubicaban en la tribuna Pavoni Alta, encima del público del Rojo que se ubicaba en las tribuna inferior y en los costados.
Según se ve en imágenes y los reportes de hinchas del conjunto de Avellaneda, los visitantes prendieron fuego, vandalizaron el lugar y comenzaron a arrojar elementos a quienes se encontraban abajo: piedras, botellas, butacas, palos y hasta un inodoro, entre otros elementos.
Si la Conmebol quiere dar un mensaje de seriedad y justicia, debería expulsar de la competencia a Universidad de Chile y darle el partido por ganado a Independiente.
🎥 @Lugonzalezdiezz capturó el momento en el que arrojaron una bomba. Una locura total. pic.twitter.com/ilATDLnpPu
— Adrián Sánchez (@AdriSanchez32) August 21, 2025
Muchos hinchas de Independiente comenzaron a intentar correrse de la zona, algunos incluso resultaron heridos por ser golpeados. Sin embargo, pese a la situación, ningún efectivo de seguridad ni la policía se hicieron presentes para contenerlo.
Con el partido frenado y el resultado 1 a 1 (la serie estaba a favor del conjunto chileno por 2 a 1), la voz del estadio solicitó en reiteradas ocasiones que el público de la U desaloje el estadio, aunque pasaron varios minutos hasta que finalmente comenzaron a salir. Los jugadores intentaron llamar a la calma, pero luego tuvieron que retirarse a los vestuarios.
Lamentablemente, aún faltaba lo peor. Cuando la mayoría de los hinchas chilenos había dejado el lugar y la situación parecía calmarse, la barra de Independiente apareció en la Pavoni Alta y comenzó a agredir a los pocos simpatizantes del rival que quedaban allí.
Los presentes captaron en videos la batalla campal que se vivió: a los visitantes los acorralaron, los desnudaron, los golpearon violentamente. Algunos terminaron inconscientes e incluso hubo quienes saltaron desde la tribuna hacia el vacío para intentar escapar.
👉 La barra brava de Independiente fue a buscar a los hinchas de Universidad de Chile.
🏟️ Previo a esto, los simpatizantes del elenco azul arrojaron proyectiles y piedras al sector del «Rojo» durante el partido que se encuentra demorado.
🤳 @AgustinMPinan https://t.co/nnT5JTbJOf pic.twitter.com/ALHCadbJ60
— Noticias Argentinas (@NAagencia) August 21, 2025
Hasta el momento, según versiones oficiales, el saldo de la barbarie en el Libertadores de América fue de 10 personas heridas -algunas de gravedad- y 90 personas detenidas en las inmediaciones, la mayoría del público chileno.
Con respecto al partido, tras su suspensión en el minuto 48, la Conmebol decidió cancelarlo. Ahora, Independiente y Universidad de Chile deberán esperar la resolución del Tribunal de Disciplina sobre la definición de la serie, aunque ambos podrían recibir sanciones muy severas.
ACUSACIONES CRUZADAS POR EL OPERATIVO POLICIAL
La principal conclusión de la trágica noche en Avellaneda fue que toda la situación se podría haber evitado de haber contado con un operativo de seguridad acorde. Algo que ocurrió el día anterior en otros partidos internacionales como Vélez-Fortaleza y Racing-Peñarol, donde se tomaron recaudos como dejar pulmones de aire entre los hinchas visitantes y los locales, colocar redes para evitar agresiones y poner personal de seguridad para contener cualquier situación de violencia.
En este caso, el presidente del Rojo, Néstor Grindetti, defendió el operativo y explicó que el mismo fue acordado por un “comité formado de seguridad por CONMEBOL, por el equipo visitante y por Independiente”.
Por su parte, Daniel Schapira, dirigente del combinado trasandino, cuestionó la ubicación que le dieron a sus hinchas. “Es también un tema de organización. No pueden poner a la hinchada de la U arriba de la barra de Independiente”, lamentó, aunque admitió que la culpa recae en ambos clubes: “Aquí hay problemas de todos”.
Desde Conmebol, responsabilizaron al conjunto de Avellaneda por lo ocurrido por “la falta de garantías de seguridad por parte del club local y de las autoridades locales de seguridad”.