Leyendo:
Adrián Suar: “Me gustaría hacer una película con Ricardo Darín”
Artículo Completo 8 minutos de lectura

Adrián Suar: “Me gustaría hacer una película con Ricardo Darín”

Mientras disfruta del éxito de su último film, “Mazel Tov”, el actor, director y productor Adrián Suar ya sueña con sus próximos proyectos. En una charla con Newsweek Argentina, confiesa que tiene ganas de volver a la televisión con una tira de ficción y que una de sus grandes cuentas pendientes es hacer una película junto al protagonista de “El hijo de la novia” y “El secreto de sus ojos”.

Por Natalí Harari

Adrián Suar lo sabe: hoy la gente dice “voy al cine a ver la última de Suar”. Se lo ganó. Sus películas son garantía de calidad, porque los espectadores saben que se van a divertir y se van a emocionar. Pero su último film, «Mazel Tov», es un caso diferente, superador.

“Esta es una película más emocional”, asegura, y agrega: “Tratamos de hacer una película que ponga en el centro los vínculos familiares, y me parece que lo logramos”.

Adrián Suar vuelve a la acción y defiende la Cultura a capa y espada

Él la dirige y la protagoniza junto a Natalie Pérez, Benjamín Rojas y Fernán Mirás, quienes personifican a los hermanos de su personaje. Darío Roitman es un emprendedor argentino, judío, que vive en Nueva York. Está a punto de viajar a Buenos Aires para el casamiento de su hermana y al bat mitzva de su sobrina, dos importantes celebraciones familiares. Quiere aprovechar ese momento para recomponer su relación con su padre y su hermano mayor, pero su padre muere y la familia debe decidir si sigue con su vida en medio del dolor o si se somete a un duelo tradicional, mientras los conflictos entre hermanos estallan para darles una nueva oportunidad.

Es una comedia que toca un punto sensible y universal: la familia. Pero no una familia idealizada, sino una familia común, real y bien argentina.

En esta charla con Newsweek Argentina, Suar habla de su película, de sus expectativas y de sus próximos desafíos, entre los que sueña incluir una película junto a Ricardo Darín, a quien produjo en “El hijo de la novia”.

Adrián Suar (Fotos: Prensa Adrián Suar)

La película «Mazel Tov» parece tener varios puntos en común con tu vida: la religión judía, la vida en Nueva York, los cuatro hermanos, por mencionar algunas cosas. ¿Hay algo autobiográfico ahí?
– No y sí. Lo que decís vos es verdad: cuatro hermanos, soy judío. Esas son circunstancias similares, pero no hacen a la película. La película es la suma de otras cosas, de otros vínculos, de hermanos, que funcionaban para esta película.

¿Cómo se sintió ser el director y el protagonista de la película?
– Yo lo viví bien, con felicidad, con el trabajo de hacer una película estando de los dos lados, pero no lo vivo más que como un trabajo, y ya lo tengo incorporado y con la experiencia de poder hacerlo. No diría que es sencillo; tanto esta como la primera («30 noches con mi ex») fueron complicadas. Esta, más complicada porque había escenas con más gente y muchos más personajes en la misma situación. Esta es una película más emocional. «30 noches con mi ex», tenía fuerza dramática también en lo emocional con Pilar Gamboa y también tenía mucho humor a través de su personaje. Pero acá tratamos de hacer una película que ponga en el centro los vínculos familiares, y en eso me parece que lo logramos. Con Fernán Mirás, Natalie Pérez y Benjamín Rojas conformamos un gran team los cuatro. Esta película es más íntima, más familiar, más de vínculos reales, más de vínculos identitarios, mucho más sobre las cosas que le pasan a la gente común.

¿Por qué elegiste el título «Mazel Tov» para la película?
– Porque me gustaba. Lo pensé mucho, no la iba a llamar así. No todo el mundo sabe lo que significa, es difícil pronunciarlo pero, a medida que lo vas escuchando, va quedando. Te lo dicen, te lo dicen y ya queda. Ese era el compromiso y lo que teníamos que sortear. «Mazel Tov» le quedaba bien. Como la película está basada en los eventos y en las situaciones de la vida cotidiana que las familias viven. Un nacimiento, que es el nacimiento del hijo de mi hermana. Un casamiento. Son ceremonias de todo tipo. Puede ser judío, católico, italiano, español, lo que fuere. Son situaciones de la vida. Está la muerte y después está la herencia, a la que pusimos como ceremonia. Y generalmente tanto en el casamiento como en el nacimiento el «Mazel Tov» está. Por lo menos nadie lo pronunció mal.

Adrián Suar debuta como director con «30 noches con mi ex» y aborda el tema de la salud mental

¿Qué expectativas tenés respecto a la película?
– Yo espero la que pase por muchas emociones, que se pueda reír en los momentos en que se tenga que reír, pero fundamentalmente que entre y se sienta identificada con la emocionalidad que le propone la película, por tener una temática muy popular. Es una película muy Argentina, pero los vínculos de hermanos son algo universal.

¿Te ponés nervioso en los estrenos?
– Muy nervioso, a pesar de tanta experiencia. Es como ir, salir y no podés hacer nada porque la película está terminada y pasa a ser de la gente. Si bien siento que hay como un consenso en la gente que la vio, a la que le pudo haber gustado más o menos, es una película que emociona.

¿Cómo te llevas con la crítica en general?
– Cuando es atinada, me entrego. A veces yo me doy cuenta cuando dicen cosas y digo “eso está bien, opino lo mismo”. Y pasa muchas veces. Y si es de mala leche, me afecta; no mucho, pero me afecta.

¿Y a vos qué te conmueve?
– Este tipo de películas me gusta. Me gusta mucho el género de películas emocionales, la comedia emocional. Veo bastante. Se hace poco últimamente en Argentina. Este es un género a mí me gusta mucho.

Tu buena visión frente a los proyectos, ¿se la atribuís a la experiencia o más a una intuición?
– Las dos cosas. Primero la intuición. Yo creo que la intuición y la experiencia hacen un buen tándem. Hay una intuición de poder creer que esto puede funcionar o no, de que las cosas se pueden alinear y que podés caer en un momento justo.

¿Sentís que llegó un punto en que la gente dice “voy a ver la película de Suar”, tal vez sin que le importe demasiado qué estás haciendo? ¿Creés que la gente piensa que tu nombre le da una cierta garantía a la película?
– No sé si pasa, pero me gusta, es un privilegio, es algo lindo. Ojalá. Pero después tenés que responder en el cine. Son materias que tenés que dar. ¿He hecho mérito para que sea así? Obvio que sí. Pero también trato de bajarle el precio porque es una forma también de poder seguir trabajando sin ponerme en “prócer”. No he perdido el impacto, las ganas de seguir. Sigo siendo curioso por las cosas, curioso por aprender y por ver y decir “esto está bien” o “esto está mal”. Y eso es genuino, no es una pose.

Adrián Suar (Fotos: Prensa Adrián Suar)

¿Tenés ganas de volver a la televisión?
– Sí, y hay una idea. Me gustaría volver a la televisión. Puede ser, produciendo con Polka o fuera de Polka, donde sea, pero volviendo a hacer, gestionando una ficción. Me gustaría ver si se puede hacer una tira.

¿Y qué crees que está pasando con la televisión y la ficción?
– Es difícil por los costos. Yo creo que es difícil financiar una ficción. Sale muy caro hacerla. Para generar lo que se generaba no están las condiciones. Pero vamos a ver cómo se puede articular para poder producir de nuevo. Esperemos…

¿Te da curiosidad también el mundo del streaming o de las nuevas plataformas?
– Me gusta lo que hacen. Lo veo a mi hijo Toto (Kirzner, su hijo). Se va curtiendo, va aprendiendo. Yo le aconsejé que tenga cuidado a veces porque el streaming es un lugar propicio para… No te das cuenta, empezás a hablar y pensás que estás en tu casa. Es muy inteligente. Son momentos y a todos los que vivimos en el mundo del espectáculo nos pasó. En un momento a mí me ha pasado, y a muchos otros les ha pasado de hacer una declaración no afortunada. Somos seres humanos, podemos decir algo poco afortunado, pero de base los que lo conocen saben que es un hombre, un pibe divino.

¿Con que artista que no has trabajado te gustaría compartir algún próximo proyecto?
– Me gustan muchos. Me gustaría hacer una película con Ricardo Darín. Yo me debo una película con él. Sería algo así como “voy al cine a ver la de Darín y Suar”.

Ingresa las palabras claves y pulsa enter.